Bisquets de Queso

Hola a todos:

Les cuento que esto de la cocinada ya se ha convertido en algo que nunca esperé, es una pasión y un placer cocinar. Mi marido dice: -cada vez que hablas es sobre comida, cada vez que estas sentada en la computadora estas viendo recetas, cada vez que lees un libro tiene que ver con el arte culinario; ahora si que estas haciendo lo que más te gusta- .  Hasta mi hijo me dice: - ¡Ma, hueles a pan!, que bueno que es a pan y no a otra cosa...jajaja...

Recientemente terminé un curso de 8 semanas en una escuela culinaria en Cambridge; el curso completo fué espectacular, me queria devorar todas las ideas, las recetas y no deje de tomar nota todo el tiempo. Cada vez que regresaba a casa pensaba durante el camino en la maravillosa sensación de aprender más de aquello que nos apasiona. Al igual que mis cursos de Yoga, en donde, sin duda me encuentro a mi misma. Pensándolo bien la cocina y la Yoga tienen mucho en común, de hecho es increíble como puedo meditar mientras preparo algún platillo.

En una de mis clases tuve la oportunidad de conocer a una Chef Italiana de nombre Ursula Ferrigno, su clase sin duda ha marcado mi forma de preparar los alimentos...

Su clase comenzó respirando profundamente, enfrente cada uno teníamos los ingredientes necesarios para hacer ¨Pan¨, nos pidió usar todos nuestros sentidos, la vista, el olfato, el tacto, el gusto....así comenzó mi aventura con Ursula.

Ella nos dijo que era un placer preparar su pan todas las mañanas, que se levantaba a eso de las 5.30am, cuando todo el mundo estaba dormido y que ahí en el silencio de su casa, junto con una taza de té, ella amasa los ingredientes, poco a poco, y al mismo tiempo medita sobre lo que fue el día anterior; dice que cada vez que amasa es como transportarse a otro lado; siempre al terminar y dejar leudar la masa da gracias a Dios por el momento y eso la hace sentir que su pan es especial... Wow!

Platicó acerca de la vida en Italia, lo importantísimo que es la vida en familia, así como también la preparación de la comida; recuerdos de su mamá y de su abuela. Fueron 6 horas las que pase en el

curso con Ursula y la verdad fueron 6 horas de aprendizaje, no solamente culinario sino del alma misma.

Al final me permití platicar con ella, desde un principio me preguntó de donde era y se sorprendió mucho

al saber que soy mexicana. Le dije que la similitud en tradiciones entre nuestros países es increíble. Le conté también acerca de mi mamá y todo lo que aprendí de ella. Sin duda una de esas mujeres que sin querer marcan tu vida para siempre.

Me despedí al final y me dio un abrazo bien fuerte, le dije que había inspirado un cambio tremendo en mi y que si ya sentía un placer por la cocina en ese momento supe que no estaba equivocada al meditar con todos mis sentidos al cocinar.

Lo más increíble fué que unos días después estuve buscando en unas cajas un libro de Pan que alguien me regaló en Querétaro, y yo recordaba haberlo visto (¡todavía tengo libros en cajas, que pena!), lo encontré junto con otros libros que, típico, me preguntaba qué había pasado con ellos. Anyway, cuando lo traje a la cocina para revisar las recetas, me quedé con la boca abierta :

Libro del Pan

Eric Treuillé y URSULA FERRIGNO

Escrito en español por la Editora Grupo Zeta, con el título originar ¨Bread¨, de verdad que me quede paralizada, sin querer yo ya había preparado algunas de sus recetas y tengo notas escritas. Por supuesto que al otro día le escribí un email contándole a detalle cómo me hizo sentir su clase y lo del libro, ella me pidió que se lo mandará por correo para escribirme una dedicatoria... esa misma tarde se lo mandé.

Y hablando de gente especial, no podía dejar de mencionar a mi amiga Sandra, una mujer que en sus manos lleva el maravilloso poder de darle al pan una magia incomparable. Gracias por estar junto a mi en todas estas nuevas aventuras y sobre todo por tenerme paciencia en mis locuras... Te quiero mucho.

Bisquets de Queso Crema

600gr Harina
1 cucharadita Azúcar
1/2 cucharadita de Polvo para hornear
1 pizca de Sal
180gr Mantequilla cortada en cubos a temperatura ambiente
4 Huevos a temperatura ambiente
100 ml + o - Leche tibia o al tiempo
100gr Levadura en polvo
200gr Queso crema cortado en cubos
Leche evaporada para barnizar

En una batidora se mezclan todos los ingredientes menos la levadura: Harina, polvo para hornear, azúcar y sal. Revolver muy bien sobre todo la sal ( si la levadura esta en contacto directo con toda la sal no se leuda la masa), ya que todo esta bien mezclado, entonces agregamos la levadura en polvo. Mezclamos bien.

A velocidad media vamos agregando la mantequilla y el queso crema, se baten de tal forma que quede una masa cremosa, después agregamos  los huevos uno por uno. Si la masa esta seca y no se ve tersa agregamos a cucharadas la leche, les puse el signo + o - porque aveces no se utiliza toda la leche, por ejemplo en este pais Inglaterra es tan tan húmedo que de hecho no lleva más que unas cuantas cucharadas.

La masa se vera elastica, no se asusten. Espolvoreen su mesa de trabajo con un poco de harina y ahi vacíen la masa, espolvoreen también la parte superior con harina y comiencen a amasar. Pueden utilizar más harina si es necesario. La masa tiene que estar tersa y que ya no se pegue en sus manos, suave y manejable.

La masa se extiende en forma rectangular y luego se dobla en tres (ver las fotos), extender la masa un poco más por encima y se cortan los bisquets con un cortador redondo. Yo también utilizo un cortador redondo pequeño para formar el ombligo del pan.

Colocar los bisquets en charolas con papel encerado. Dejar leudar unos 20 min.  y barnizarlos con leche evaporada (nos da un color hermoso).

Hornear a horno precalentado 200C  por 20 min. En cuanto tomen un color dorado por encima.

Disfrútenlos cuando aún están calientes, son increíbles con mermelada de naranja o de durazno... a mis chicos les encantan con dulce de leche y a mi marido así solitos con un café